El presidente estadounidense, Donald Trump habló este jueves positivamente sobre un impuesto en las fronteras que ha sido empujado por los republicanos en el Congreso como una forma de impulsar las exportaciones, aunque no detalló en que consistiría la propuesta.
Trump, quien ha arremetido en contra las empresas estadounidenses para que sus operaciones y fuentes de trabajo sean trasladados a países como México. Anteriormente ya se había enviado señales sobre la propuesta de los republicanos sobre la reforma al código tributario.
“Podría dar lugar a muchos más puestos de trabajo en los Estados Unidos”, dijo Trump a Reuters en una entrevista.
Trump ha sido un tanto contradictorio en cuanto a su posición sobre el impuesto fronterizo en diversas entrevistas con los medios; en enero dijo que era “demasiado complicado”, mientras que en otra entrevista aseguró que “aún estaba sobre la mesa” el tema.
La propuesta ha dividido a los empresarios estadounidenses. Los analistas dicen que el impuesto, previsto en 20% a las importaciones, se podría transferir directamente a los consumidores, incluidos los fabricantes que dependen de las mercancías importadas para fabricar sus productos.
Analistas incluso han advertido que esto podría ocasionar una guerra comercial global, al reducir drásticamente la competitividad comercial de los Estados Unidos y el crecimiento económico mundial.
Quienes apoyan la propuesta, aseguran que los exportadores estadounidenses lograrán que sus ingresos estén beneficiados por los impuestos federales. Dicen que el impuesto a las importaciones estimulará la producción nacional y así dar paso a un fortalecimiento del dólar, compensando la presión al alza sobre los precios de importación.
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