La Reserva Federal, banco central estadounidense, dejó sin cambios la tasa de interés, en su nivel actual en un rango entre el 5.25% y el 5.5%, un mínimo de 22 años, aunque abrió la puerta a un cambio inminente, al eliminar de su comunicado, que está considerando futuros aumentos.

Por el contrario, precisó que se está acercando una reducción de las tasas de interés, señal de que sus directivos confían en que están llevando la inflación bajo control.

Aun así, el banco enfatizó que “no vaticina que será apropiado” reducir las tasas de interés “hasta que haya cobrado una mayor confianza de que la inflación se está moviendo de manera sostenida” hacia su meta de 2%.

Ello sugiere que es poco probable que el banco reduzca las tasas en su próximo encuentro que se tiene programado para marzo.

Los cambios en la declaración comparado con el discurso que usó en su último boletín en diciembre indican que el banco definitivamente se ha orientado hacia considerar reducciones de las tasas. Recordemos que en diciembre el banco dijo que aplicaría tres reducciones de un cuarto de punto este año. Sin embargo, los funcionarios han dicho poco sobre cuándo empezarían, aunque hace unos días enfatizaron que la institución procedería con cautela.

El cambio de posición de la Fed ocurre en momentos en que la economía ha demostrado una sorprendente solidez después de 11 aumentos de las tasas de interés, orientados a inhibir la inflación que llegó a máximos de cuatro décadas hace 18 meses.

En los últimos seis meses, los precios han aumentado a una tasa anual debajo del 2%, lo que se ajusta a la meta del banco, según la medida inflacionaria preferida de la Fed. Y el crecimiento económico sigue siendo saludable. En los últimos tres meses del año pasado, la economía creció a una tasa anual de 3.3%, informó el gobierno la semana pasada.

En una conferencia posterior, el presidente de la Fed, Jerome Powell, dijo que si la economía evoluciona “en términos generales como se espera, probablemente será apropiado comenzar a reducir la moderación de la política en algún momento de este año”.

“Creemos que nuestra tasa de política probablemente esté en su punto máximo para este ciclo de ajuste”, señaló.

El presidente de la Fed afirmó que no necesitan “datos mejores” sino “la continuación de los buenos datos que hemos estado viendo”. “Tenemos seis meses de buenos datos de inflación, la pregunta realmente es: seis meses de buenos datos de inflación ¿nos están enviando una verdadera señal de que, de hecho, estamos en un camino sostenible hacia una inflación del 2%? Esa es la pregunta y la respuesta vendrá con más datos”, insistió.

La Fed es consciente, añadió, de que “reducir los tipos demasiado pronto o demasiado podría dar lugar a una reversión del progreso” y derivaría en “una política más estricta para que la inflación vuelva al 2%”, remató.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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