Ningún miembro del Congreso que representa el territorio fronterizo de Estados Unidos dijo que apoya la petición del presidente Donald Trump de destinar 1.4 miles de millones de pesos para comenzar la construcción del muro prometido, según una encuesta del Wall Street Journal.

 

La mayoría de los legisladores que representan a la región -tanto demócratas como republicanos- dijeron que se oponían y muchos dijeron que tenían preguntas sin respuesta. Algunos fueron reservados sobre su opinión, pero ningún miembro de la Cámara o Senado de la región expresó su apoyo a la solicitud de financiamiento. Eso incluye nueve miembros de la Cámara y ocho senadores en cuatro estados: Texas, Nuevo México, Arizona y California.

 

La cuestión es cada vez más urgente a medida que el Congreso y la Casa Blanca se apresuran a acordar un proyecto de ley de gasto necesario para mantener abierto al gobierno. Los fondos existentes para el gobierno vencen el 28 de abril próximo y la Casa Blanca dice que quiere financiar el muro fronterizo como parte de la propuesta. Los republicanos del Congreso han indicado durante mucho tiempo que prefieren dejar fuera este tema. Eso se debe en parte a que los senadores demócratas se oponen, y sus votos serán necesarios porque la mayoría de la legislación requiere 60 votos, donde los republicanos tienen 52 escaños. Los republicanos del Congreso han dicho que no quieren arriesgar el cierre parcial del gobierno que tal enfrentamiento podría desencadenar.

 

Sin embargo, la Casa Blanca se mantiene firme en su posición.

 

Mick Mulvaney, republicano y jefe de la Oficina de Administración y Presupuesto, aseguró que los republicanos luchan por el financiamiento porque “saben que es una prioridad para el presidente”.

 

Un portavoz de la líder de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, aseguró que las cosas han cambiado luego de que Trump había prometido que México pagaría por el muro: “Ahora la Casa Blanca habla de que los contribuyentes estadounidenses paguen el costo de varios mil millones de dólares por el muro”.

 

El entusiasmo por el proyecto ha sido débil por llamarlo de la mejor manera en muchos legisladores desde que Trump presentó su solicitud. En marzo, pidió al Congreso 1.4 miles de millones de pesos en gasto para el actual año fiscal que esperaba destinar al proyecto, y  2.6 miles de millones adicionales para el próximo año. Muchos republicanos respondieron que  la propuesta  de Trump está empeñado en una barrera física en lugar de tener en cuenta otros enfoques de la seguridad fronteriza, como la tecnología, que los expertos dicen que puede ser más eficaz y menos costosa.

 

 

“Como representantes de las comunidades que conforman nuestra frontera sur, reconocemos la necesidad de una barrera sólida de seguridad fronteriza e infraestructura para garantizar la seguridad pública y aumentar el comercio transfronterizo”, declararon los representantes Will Hurd (R., Texas) y Martha McSally (R. , Arizona), declaraciones que manifestaron en una carta el mes pasado a altos funcionarios de la administración. “Sin embargo, también tenemos la obligación de ser buenos administradores de los ingresos de los contribuyentes y como tal tenemos dudas al respecto”.

 

La oposición en los estados fronterizos es significativa, ya que muchos conocen mejor el tema. McSally, por ejemplo, preside el subcomité de Seguridad Fronteriza de Seguridad Nacional, y en una entrevista, dijo que las barreras físicas hacen poco para impedir que las organizaciones criminales atraviesen la frontera. “Van a pasar, a través o bajo barreras físicas, a veces muy rápidamente”.

 

Un tercer republicano, el representante Steve Pearce de Nuevo México, también se opone a la financiación si se centra en un muro, en contraposición a un enfoque más amplio. “La solución debe ser dinámica y multifacética”, dijo. En el Senado, ninguno de los cuatro republicanos que representan a los estados fronterizos han expresado su apoyo al proyecto concebido por Trump.

 

El senador John Cornyn, de Texas, el republicano número 2 en el Senado, ha expresado en repetidas ocasiones su preocupación por la solicitud de gasto de Trump, incluyendo el impacto de agregar a la deuda, así como la viabilidad del proyecto. Cornyn ha dicho durante mucho tiempo que la propuesta del muro de Trump está demasiado enfocada, y dice que está trabajando en una propuesta que adoptaría un enfoque más amplio de la seguridad fronteriza.

 

El Senador Jeff Flake (Arizona) dijo que también piensa que la seguridad fronteriza debe centrarse en otros aspectos. “Continuaré revisando las opciones a medida que avance el proceso de asignaciones actuales”, dijo en un comunicado el viernes.

 

Los senadores Ted Cruz (Texas) y John McCain (Arizona) también han expresado su escepticismo sobre el plan de Trump. Un portavoz de Cruz no respondió cuando se le preguntó directamente si apoya la solicitud de gasto suplementario, y una portavoz de McCain se negó a comentar.

 

Mientras tanto, los demócratas de la Cámara y del Senado se oponen por completo a la propuesta. “No hay manera en todo el mundo de apoyar  la propuesta de gasto para el muro que propone Trump. Mi opinión del muro es que deberíamos arrasar las estructuras existentes”, dijo el representante Filemon Vela (Texas).

 

El diputado Raúl Grijalva (Arizona) se sumó a una demanda que busca bloquear el proyecto en base a factores ambientales. Los otros demócratas de la Cámara de Representantes que se oponen al proyecto incluyen a los representantes Juan Vargas, que representa toda la sección de California de la frontera.

“La idea de un muro suena bien como retórica de la campaña, pero la campaña ha terminado y tenemos que ofrecer al pueblo estadounidense soluciones reales, no una falsa sensación de seguridad”, dijo Vicente González, demócrata.

 

En el Senado, los demócratas Dianne Feinstein y Kamala Harris de California y Tom Udall y Martin Heinrich de Nuevo México se oponen fuertemente, según declaraciones y entrevistas.

 

 

 

 

Con información de The Wall Street Journal / Foto: Archivo APO

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



Escribe un comentario