El magistrado presidente del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Reyes Rodríguez Mondragón, aseguró que la ciudadanía puede estar segura de que las autoridades electorales actúan con independencia, con profesionalismo y que su voto será protegido.
Al participar en el panel “Los retos de la elección 2024”, organizado por el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Jalisco, en el marco de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL), el magistrado indicó que solo el voto será el que valide cualquier triunfo en las elecciones del próximo año.
Rodríguez Mondragón sostuvo que las autoridades electorales y la ciudadanía garantizan la estabilidad política y democrática, pues aunque hay desafíos operativos y técnicos, no es motivo de inquietud la capacidad organizativa de las autoridades electorales, administrativas, federales y estatales.
Indicó que que tampoco se pone en duda el actuar del TEPJF, pues ha probado ser capaz de resolver disputas entre actores políticos, proteger los derechos de las personas y estabilizar el entorno político-electoral del país, aún en los escenarios más inéditos.
Señaló que el Tribunal está preparado para el proceso electoral más grande de la historia, pese al ajuste a su presupuesto.
Tras exponer varios desafíos del actual contexto electoral, como la polarización afectiva, los diversos tipos de violencia, particularmente en contra de las mujeres y la desinformación, entre otros, Rodríguez Mondragón sostuvo que el Tribunal Electoral tiene que responder con certeza, legalidad, independencia, imparcialidad, y sobre todo, buscando que sus decisiones contribuyan a la construcción de paz.
Destacó que las candidatas y los candidatos, los partidos de todos los colores, acuden al Tribunal Electoral porque se percibe imparcial. Tal percepción, explicó, es el resultado de las acciones implementadas como el turno aleatorio, la publicidad de los proyectos de sentencias, y toda una política de justicia abierta y apertura.
Dijo que el proceso electoral en curso representa retos, pero es ante toda una gran oportunidad para consolidar las instituciones y la democracia; señaló que ésta no debe concebirse solo como un sistema político, sino una promesa de vida, en donde se busca la reducción de la pobreza, de la desigualdad y una mejor justicia.
