El negociador jefe ruso, Vladímir Medinski, advirtió hoy a Ucrania de que el estatus tanto de la anexionada península de Crimea como de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, cuya independencia fue reconocida por el Kremlin, son intocables para Rusia.

“Quiero subrayar que la postura de principio de nuestro país en relación con Crimea y el Donbás sigue siendo invariable”, dijo Medinski en una declaración por la televisión pública.

Al respecto, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, calificó como positivas las negociaciones entre ambos bandos celebradas ayer en Estambul. “La soberanía y la integridad territorial de Ucrania deben quedar garantizadas. No puede haber ni habrá ningún compromiso sobre la soberanía e integridad territorial”, señaló.

Su asesor presidencial, Mykhailo Podoliak, explicó que Kiev propuso a Moscú un plazo de quince años para negociar el estatus de Crimea, anexionada por Rusia en 2014.

Recordemos que el presidente ruso, Vladímir Putin, reconoció tres días antes del inicio de la “operación militar especial” en Ucrania la independencia de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk.

Tanto Putin como los líderes separatistas destacaron que su objetivo era recuperar el control de todo el territorio administrativo de las regiones de Donetsk y Lugansk, según la Constitución ucraniana.

Precisamente, el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, aseguró que ahora el Ejército ruso se centrará en la conquista de todo el Donbás.

Medinski, que regresó de Estambul, donde tuvo lugar la quinta ronda de negociaciones, destacó que “ayer, por vez primera en muchos años, las autoridades de Kiev expresaron su voluntad de llegar a un acuerdo con Rusia”. Es decir, agregó, “Ucrania se mostró dispuesta a cumplir con las principales demandas en las que Rusia insistió durante los últimos años”.

Se refería a la renuncia de Ucrania a ingresar a la OTAN, a pertenecer a bloques militares, a las armas nucleares y a poseer, adquirir o desarrollar otras armas de destrucción masiva, y a acoger bases o contingentes militares extranjeros.

Además, destacó, Kiev también se comprometería a organizar maniobras militares con participación de fuerzas extranjeras sólo con el consenso de todos los garantes internacionales de su seguridad, que incluye a once países, incluido Rusia.

“Si esas obligaciones se cumplen, entonces quedará eliminada la amenaza de creación en territorio ucraniano de una plataforma de la OTAN”, resaltó.

Medinski precisó que Kiev entregó a Moscú “plasmados en papel los principios de un posible y futuro acuerdo”. “El trabajo sigue, las negociaciones continúan”, dijo.

Según la prensa, Rusia habría renunciado en las negociaciones a demandas como la “desnazificación” de Ucrania y el estatus de la lengua rusa.

En otro de los compromisos hechos por Rusia, de reducir la presencia de sus tropas en la capital Ucraniana así como en Chernihiv, el portavoz del Ministerio de Defensa de Ucrania, el coronel Oleksandr Motuzyanyk, afirmó que sí se ha producido una “retirada parcial de unidades del enemigo” en los alrededores de Kiev.

“Sin embargo, no podemos hablar aún de un repliegue a gran escala”, matizó, señalando que “es muy pronto para saber qué intenciones tiene Rusia”. Anoche todavía se registraron ataques rusos en ambos lugares.

El coronel indicó que esas unidades rusas del centro del país se están retirando hacia el este, a las provincias de Donetsk y Lugansk.

“Podemos confirmar esa información porque hemos visto que están concentrando allí su actividad. Los intentos de ofensiva del enemigo no han cesado allá”, aclaró el portavoz de Defensa sobre la situación en la región oriental del Donbás, donde una guerra civil de baja intensidad ya se libraba desde 2014 con milicias prorrusas.

En más sobre Moscú, la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, denunció este miércoles que las fuerzas armadas rusas han usado en al menos 24 ocasiones bombas de racimo, prohibidas por la ley internacional, contra áreas pobladas de Ucrania en las cinco semanas transcurridas desde el inicio de la guerra.

Se han cometido además ataques indiscriminados contra hospitales, escuelas y otras infraestructuras que “están prohibidos por la ley humanitaria nacional y podrían constituir crímenes de guerra”, añadió Bachelet en una intervención ante el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas.

Adicional, se informó este miércoles que el presidente Vladimir Putin fue engañado por sus asesores sobre lo mal que va la guerra en Ucrania y lo perjudicial que han sido las sanciones occidentales para la economía rusa, dijo un responsable estadounidense, que basa su información en reportes desclasificados.

“Creemos que Putin está siendo mal informado por sus asesores sobre lo mal que se está desempeñando el Ejército ruso y sobre cómo la economía rusa está siendo paralizada por las sanciones, porque sus asesores tienen demasiado miedo de decirle la verdad”, dijo el funcionario que habló bajo condición de anonimato.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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