Después de meses de campaña, debates y promesas, los votantes por fin este lunes iniciarán en Iowa el proceso para elegir qué candidato demócrata intentará arrebatar a Donald Trump la Casa Blanca en las elecciones generales de noviembre.

Los habitantes de Iowa se reunirán esta noche en unas asambleas conocidas como “caucus”. Habrá “caucus” para los demócratas y para los republicanos, aunque Trump no se enfrenta a ningún rival significativo, por lo que todas las miradas se centrarán en los demócratas.

Exactamente a las 19:00 hora local, los iowanos dejarán de esperar en fila y entrarán a alguno de los 1,678 puntos donde se celebran asambleas: desde gimnasios y cafeterías escolares hasta iglesias, sótanos y casas particulares.

Por ser el primer estado donde los electores se pronuncian, Iowa acapara la atención de políticos y periodistas, lo que le da a este “caucus” una especial trascendencia dentro de las primarias.

No obstante, en los últimos años, han crecido las voces que cuestionan el poder de Iowa: en todo EUA hay 150 millones de personas registradas para votar, mientras que en Iowa ese número es solo de 2 millones y se estima que esta noche solo participarán entre 200,000 y 300.000.

Además, demográficamente, este primer estado no representa la diversidad del país: en EUA el 16.3% de la población es hispana y el 13.6% afroamericana, mientras que en Iowa solo hay un 5% de hispanos y un 3.4% de afroamericanos, según los datos del último censo.

Iowa, sin embargo, se aferra a sus tradicionales “caucus”. Estas son algunas de las claves para comprenderlos:

1) ES UN PROCESO “COLECTIVO”: Lo primero que hay que entender es que un “caucus” no es una primaria. Las asambleas son un acto “colectivo”, en el que el grupo debate y decide por un candidato, mientras que las primarias son “individuales”. En las primarias, las votaciones comienzan por la mañana, duran todo el día y, cuando se cierran los colegios electorales, se cuentan los votos. En los “caucus” de Iowa no hay un horario de votación y tampoco papeletas para depositar en urnas. Una vez que los vecinos se reúnan, el debate para elegir a un candidato puede extenderse durante horas.

2) SE VOTA EN GRUPO:  En los “caucus” se vota en grupo. Una vez que comienza la reunión, los representantes de las diferentes campañas dan argumentos a favor de su candidato y, enseguida, los electores se separan formando grupos para colocarse en un lugar específico de la sala y señalar su apoyo por un aspirante.

3) HAY QUE PERSUADIR: Cuando los asistentes están divididos en grupos se hace un conteo. Para pasar a la siguiente ronda, cada candidato necesita el respaldo de al menos un 15% de los electores. Quien no lo alcanza es eliminado y sus seguidores se quedan libres, de forma que pueden pasar a integrar las filas de los indecisos o del grupo de otro aspirante.

4) IOWA TIENE UN PESO SIMBÓLICO: Concluidos todos los “caucus”, el Comité Nacional Demócrata (DNC) calcula cuántos delegados se lleva cada candidato. En EUA, los electores no eligen directamente mediante su voto al candidato de su partido en un proceso de primarias, sino que relegan esa responsabilidad en los delegados, cuyo número varía dependiendo del estado. Iowa reparte 41, una cantidad ínfima comparada con los 1,990 que necesitará cualquier candidato demócrata para asegurar la nominación y poder así enfrentarse a Trump en noviembre.

Foto: Twitter @brianneDMR

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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