La diferencia de votos entre la candidata derechista Keiko Fujimori y el izquierdista Pedro Castillo es mínima este lunes, cuando con casi el 95% de las mesas escrutadas la líder conservadora se encontraba por debajo de Pedro Castillo, quien suma que suma el 50.16% de los votos según el órgano electoral de Perú.
#ONPEinforma [ACTUALIZACIÓN DE RESULTADOS] Actas contabilizadas para fórmula de presidente y vicepresidentes a las 14:22 horas del 7 de junio. pic.twitter.com/mkzJxD90zi
— ONPE (@ONPE_oficial) June 7, 2021
Con este resultado los candidatos se distancian por poco más de 30 mil votos y Perú se encamina a una definición voto a voto, según los cómputos de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE).
Por el momento siguen sin escrutarse varias actas de las zonas rural, selvática y el voto en el extranjero, donde estaban registrados un millón de electores.
“Estamos trasladándonos a Lima porque allá están las autoridades. Hoy el pueblo solamente el pueblo va salvar al pueblo”, dijo Castillo en Chota, quien pidió a sus simpatizantes no caer en ninguna provocación, le pidió tranquilidad a la juventud y “mesura esperamos que en estas horas que trascurran sean totalmente trasparentes. Desde Chota, cuna de los ronderos les pido tranquilidad y madurez de la autoridades”.
Un recuento rápido no oficial realizado por Ipsos Perú a última hora del domingo daba a Castillo una pequeña ventaja después de que una encuesta a pie de urna dijera que Fujimori conseguiría la victoria, dejando al país, a los inversores y a las empresas mineras en una situación de elevada incertidumbre.
El probable final de fotografía podría dar lugar a días de tensión, ya que la votación pone de manifiesto la fuerte división entre la capital, Lima, y el interior del país, que ha impulsado el inesperado ascenso de Castillo.
Castillo, de 51 años, hijo de campesinos, ha prometido reformar la Constitución y la legislación minera de Perú. Fujimori, de 46 años, hija del expresidente Alberto Fujimori, encarcelado por abusos contra los derechos humanos y corrupción, ha prometido seguir el modelo de libre mercado y mantener la estabilidad económica en Perú, segundo productor mundial de cobre, con “mano dura de madre”.