Bernie Sanders resultó ganador de la primaria demócrata de New Hampshire, en una mala noche para el exvicepresidente Joe Biden, por meses favorito, que quedó quinto en la carrera para elegir al rival de Donald Trump en noviembre.

Sanders, el abanderado del ala progresista del partido, obtuvo el 25.8% de los votos con el 91% de los votos contados, repitiendo así su triunfo de 2016, cuando venció a su rival Hillary Clinton.

“Esta victoria aquí es el principio del fin para Donald Trump”, dijo Sanders a sus seguidores, en medio de reclamos por impuestos más justos y una reforma del sistema de salud.

Dos moderados se ubicaron en segundo y tercer lugar: Pete Buttigieg, exacalde de South Bend, Indiana, cosechaba el 24.4% de las apoyos, y la senadora de Minesota, Amy Klobuchar, el 19.8%. Cuarta se colocaba la senadora progresista de Massachusetts, Elizabeth Warren (9.3%).

“Tantos de ustedes participaron. Demócratas de pura cepa. Independientes dispuestos a permanecer al margen. E incluso algunos nuevos exrepublicanos. Listos para votar por algo nuevo”, dijo Buttigieg, anunciando que su campaña se trasladará ahora a Nevada y Carolina del Sur, los próximos en decidir el 22 y 29 de febrero.

Los aspirantes demócratas a la Casa Blanca buscan afinar la contienda tras un caótico comienzo del proceso de nominación partidaria la semana pasada en los caucus de Iowa, donde Buttigieg y Sanders quedaron cabeza a cabeza tras un vergonzoso conteo de varios días.

Para algunos, sin embargo, los resultados en New Hampshire supusieron el fin de la carrera, dejando en nueve el total de aspirantes demócratas a derrotar a Trump.

Andrew Yang, un empresario tecnológico nuevo en la arena política, y el senador de Colorado, Michael Bennet, anunciaron su retiro luego de esta primera elección con voto secreto en el maratónico camino hacia la investidura demócrata que surgirá de la convención en julio.

Joe Biden pasó de estar en la cima de la contienda al borde del precipicio. En una semana.

Favorito durante meses para la nominación demócrata a La Casa Blanca, el exvicepresidente de Barack Obama se presentaba como un estadista de peso y el mejor preparado de su partido para derrotar a Donald Trump en noviembre.

Luego de liderar las encuestas a nivel nacional, el veterano político ha visto tambalear sus ambiciones. Tras quedar cuarto en Iowa, ayer se ubicó en un sorprendente quinto puesto en New Hampshire.

Fuente: NYT

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



Escribe un comentario