La ayuda humanitaria esperada urgentemente por los palestinos en la Franja de Gaza podrá comenzar a ingresar desde Egipto, anunciaron el presidente estadounidense Joe Biden y Egipto.

Tras la visita de ayer a Israel, y de una intensa diplomacia telefónica con autoridades de Egipto, Biden dio a conocer que un número limitado de camiones cruzarán el puesto de fronterizo de Rafah desde Egipto a Gaza a partir de mañana viernes.

La presidencia egipcia también anunció el acuerdo en un comunicado.

Será el primer embarque de ayuda a Gaza desde el 7 de octubre, cuando el grupo palestino Hamás realizó un ataque sin precedentes contra Israel, donde mató a 1,400 personas, en su mayoría civiles, y tomó a cerca de 200 rehenes.

Desde entonces Israel mantiene el territorio bajo asedio total, con una oleada de bombardeos aéreos y el bloqueo del enclave palestino y miles de soldados listos para una incursión terrestre.

La ONU y grupos humanitarios han suplicado que Israel alivie su asedio sobre Gaza para permitir el ingreso de agua, alimentos, combustible y medicamentos.

Biden llegó a Israel al día siguiente del bombardeo del hospital Ahli Arab en la ciudad de Gaza, que conmocionó a la comunidad internacional y desencadenó protestas en varios países musulmanes. Palestinos e israelíes se culpan mutuamente de la matanza en el enclave.

“Esta horrible masacre fue perpetrada con la ayuda de un arsenal militar estadounidense disponible sólo para el ocupante Israel”, afirmó Hamás. Sin embargo, el portavoz militar israelí, Daniel Hagari, aseguró en cambio que tenía pruebas de que la explosión en el centro sanitario se debió a “un cohete de la Yihad Islámica que falló”. El grupo armado, aliado de Hamás, rechazó la acusación.

Biden también atribuyó el atentado contra el hospital a un “cohete fuera de control” disparado por un “grupo terrorista” de Gaza.

En un discurso desde Tel Aviv, Biden afirmó que “Israel no está solo” y señaló que Hamás no representa a la mayoría de los palestinos. Sugirió al pueblo israelí no dejarse guiar por el odio, recordando que eso hizo Estados Unidos en 2001, tras los ataques terroristas de Al Qaeda, y eso llevó a su país a cometer muchos errores.

Tras anunciar el acuerdo para enviar ayuda humanitaria a Gaza, Biden advirtió que “si Hamás la confisca, no se deja pasar (…) entonces terminará”.

Recordemos que cientos de camiones esperan desde hace varios días que el puesto fronterizo de Rafah se abra para permitir la entrada de ayuda, donde 2.4 millones de habitantes se están quedando sin agua y comida.

“Ante el pedido del presidente Biden, Israel no frustrará el envío de ayuda humanitaria vía Egipto”, indicó previamente el gabinete del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dando luz verde a la entrada de los insumos.

El pacto consiste en la entrada de “comida, agua y medicinas” y valdrá “en la medida en que el aprovisionamiento no llegue a Hamás”, precisó el comunicado israelí. El documento detalló también que no incluía la entrada de ayuda desde Israel mientras hubiera rehenes en Gaza.

En otra muestra de solidaridad con Israel, Biden anunció que pediría al Congreso una ayuda “sin precedentes” para su aliado, como parte de un paquete de 100,000 millones de dólares que incluye también ayuda para Ucrania y Taiwán.

¿Qué hay detrás de la visita de Biden a Israel? ¿Llegó en el momento adecuado? En Broojula, Ana Paula Ordorica platica con Fausto Pretelin, analista internacional y columnista de El Economista, sobre el viaje de Biden y cómo la guerra en Medio Oriente abre la puerta a un nuevo orden geopolítico.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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