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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo este lunes que está considerando a cuatro o cinco juristas para reemplazar a la fallecida jueza Ruth Bader Ginsburg en la Suprema Corte y que anunciará a su nominado el próximo viernes o el sábado.

Trump siguió adelante con sus planes para realizar su tercera nominación para la Suprema Corte que consolidaría una mayoría conservadora de 6-3, mientras crece la duda entre republicanos sobre si respaldarán una decisión así semanas antes de una elección.

El mandatario republicano indicó en entrevista con Fox News que quería esperar por respeto a Ginsburg, una magistrada liberal que murió el viernes a los 87 años.

“Deberíamos esperar hasta que hayan concluido los servicios por la jueza Ginsburg”, afirmó.

La muerte de un icono liberal como Ginsburg agitó la campaña, ofreciendo a Trump y su partido la oportunidad de fortalecer su influencia sobre el tribunal, cuyas decisiones influyen en la mayoría de las esferas de la vida estadounidense, desde la salud hasta los derechos sobre las armas y el acceso al voto.

Trump dijo que la votación sobre su candidato a la Suprema Corte debería celebrarse antes de la elección del 3 de noviembre.

“Ganamos la elección y tenemos derecho hacerlo, así que tenemos mucho tiempo, bastante tiempo”, dijo Trump a Fox. “La votación final debería celebrarse antes de la elección. Tenemos mucho tiempo para eso”.

Al respecto, el candidato del Partido Demócrata a La Casa Blanca, Joe Biden, ha instado a los senadores republicanos a “seguir su conciencia” y aplazar hasta después de las elecciones de noviembre el debate sobre la vacante que dejó Ruth Bader Ginsburg.

Biden se ha dirigido durante un mitin en Filadelfia al “puñado” de senadores republicanos que, en la práctica, “decidirán” si finalmente hay un sustituto para Ginsburg antes de que pueda saberse quién será presidente de Estados Unidos durante los próximos cuatro años.

“No voten para confirmar a nadie nominado en las circunstancias que  Trump y (Mitch) McConnell han creado”, ha dicho, en alusión al líder de  la mayoría en la Cámara Alta. “Dejen que el pueblo hable”, añadió, apelando a los senadores que, según sus propias palabras,  “saben lo que conviene al país”.

En este sentido, Biden ha reivindicado su derecho a proponer el nombre del nuevo magistrado si es él quien se impone en los comicios del 3 de noviembre.

La senadora republicana Lisa Murkowski anunció este domingo que se opone a que se cubra la vacante antes de las elecciones del próximo 3 de noviembre, con lo que son ya dos las legisladoras conservadoras que lo rechazan.

“Durante semanas he afirmado que no apoyaría ocupar una potencial vacante en la Suprema Corte tan cerca de las elecciones. Lamentablemente lo que entonces era hipotético ahora es nuestra realidad, pero mi postura no ha cambiado”, dijo Murkowski, que representa al estado de Alaska, en un comunicado.

“No respaldé aceptar una nominación (de un juez) ocho meses antes de las elecciones de 2016 para cubrir la vacante que dejó el juez (Antonin) Scalia. Ahora estamos incluso más cerca de las elecciones de 2020, a menos de dos meses, y creo que deben aplicarse los mismos estándares”.

De esta manera Murkowski se une a la senadora republicana por Maine Susan Collins en su oposición a que Ginsburg sea reemplazada en la Corte antes de los comicios.

Collins consideró el sábado que “la decisión de un nombramiento vitalicio para el Tribunal Supremo debería ser hecha por el presidente que sea elegido el 3 de noviembre”.

Recordemos que Ginsburg falleció el pasado viernes a los 87 años; con ella, la corte tenía cinco jueces conservadores y cuatro progresistas, con lo que si Trump logra la confirmación de su nominado apuntalaría aún más el predominio conservador, que podría durar décadas y adoptar decisiones de suma importancia en asuntos como el aborto o la inmigración, fundamentales para su base de votantes.

Los jueces de ese tribunal son designados por el presidente y confirmados en el Senado.

Los republicanos son mayoría en la Cámara Alta con 53 de los 100 escaños, y necesitarían 51 votos para confirmar al nominado por Trump para la Suprema Corte, con lo que solo pueden perder tres respaldos antes de que el presidente de la Cámara, el vicepresidente del país Mike Pence, pudiera emitir un voto de desempate.

Si aparte de Collins y de Murkowski, otros dos senadores republicanos se oponen a celebrar la confirmación del nominado por Trump antes de las elecciones, los demócratas tendrían entonces apoyo suficiente para evitar que se produjera la nominación.

Foto: Twitter @Politico

El presidente Donald Trump anunció el viernes que entregará casi 13,000 millones de dólares en ayuda a Puerto Rico para la reconstrucción de la red eléctrica y la reparación de escuelas tras los estragos causados por el huracán María hace tres años.

El anuncio ha levantado un sin fin de críticas, ya que sus críticos aseguran que dicha asistencia debió entregarse hace mucho tiempo, por lo que ahora es señalado de hacerlo para obtener algún beneficio de cara a la elección presidencial del próximo 3 de noviembre.

Trump, que previamente se ha mostrado reacio a proveer asistencia a la isla, y el candidato presidencial demócrata Joe Biden se disputan el respaldo de los electores en el estado de Florida, donde viven numerosos puertorriqueños, incluidos muchos que huyeron de los destrozos de María. El estado es clave en las elecciones presidenciales.

Trump responsabilizó del retraso a los demócratas en el Congreso que aprobaron la financiación y presionaron para su entrega.

“Soy lo mejor que le ha pasado a Puerto Rico, no hay quien se acerque siquiera”, afirmó el mandatario en una conferencia de prensa en La Casa Blanca.

La gobernadora puertorriqueña Wanda Vázquez le agradeció a Trump y al gobierno la entrega de los fondos, una de las mayores sumas jamás proporcionadas por la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA) para ayuda por desastres. “Trabajar en equipo da resultados”, dijo Vázquez en una serie de tuits.

La representante demócrata Nydia M. Velázquez dijo que el momento escogido era digno de resaltar, tres años después de que la tormenta destruyó la red eléctrica de Puerto Rico y causó el apagón más prolongado en la historia de Estados Unidos.

“El gobierno de Trump demoró y se resistió a asignar esos fondos tan necesarios”, dijo Velázquez, que nació en Puerto Rico. “Ahora, cuarenta y seis días antes de las elecciones, el gobierno finalmente considera adecuado entregar esos fondos”.

Tras el paso de la tormenta, el mandatario se enfrascó en una disputa pública con la alcaldesa de San Juan por sus críticas a la respuesta de su gobierno.

Recordemos que Trump hizo enfurecer a muchos al lanzar rollos de toallas de papel a una multitud de personas durante una visita a una iglesia de la isla. Este año, los demócratas colocaron una imagen de la escena en una valla publicitaria en Kissimee, una ciudad de gran población puertorriqueña del centro de Florida.

Por su parte la campaña de Joe Biden afirmó este viernes que los 13,000 millones de dólares para Puerto Rico es “claramente una maniobra política desesperada para ganarse a los partidarios puertorriqueños”.

Foto: Twitter

Joe Biden visitó Florida el martes en medio de una campaña por atraer el voto hispano, y arremetió contra el presidente Donald Trump por sus declaraciones de que los soldados caídos son “bobos” y “perdedores”.

“En ningún aspecto sus faltas son más flagrantes y más ofensivas, al menos para mí, que cuando se trata de denigrar a nuestros miembros del servicio, veteranos, guerreros heridos que han caído”, dijo Biden en un evento de campaña con veteranos de Tampa.

Los comentarios ofensivos del presidente hacia los miembros del servicio militar, caídos y capturados, fueron obtenidos de forma anónima y reportados por primera vez en The Atlantic. Según esos reportes, Trump llamó “perdedores” y “bobos” en 2018 a los soldados muertos en la Primera Guerra Mundial que están enterrados en un cementerio estadounidense en Francia.

Y aunque Trump ha negado haber hecho esos comentarios, muchos fueron confirmados de forma independiente por la agencia The Associated Press.

Biden ha tomado esos comentarios como una oportunidad para ganarse el voto de los veteranos y las familias de militares, que apoyaron ampliamente a Trump en las elecciones de 2016.

Con ese evento Biden inició su primer viaje a Florida como candidato presidencial demócrata. Más tarde, Biden asistió a un evento por el Mes de la Herencia Hispana en Kissimmee, cerca de Orlando, buscando el apoyo entre los latinos que podrían decidir la elección en uno de los estados más reñidos del país.

Biden afirmó que habló sobre cómo “voy a trabajar como el diablo para dar la vuelta a todos los votos latinos e hispanos”, dijo Biden el lunes.

Una victoria de Biden en Florida reduciría drásticamente el camino hacia la reelección de Trump. Pero en un estado donde las elecciones a menudo se deciden por un punto porcentual, existe una creciente preocupación de que el ex vicepresidente pueda estar perdiendo terreno, particularmente con los influyentes votantes latinos del estado.

Una encuesta de NBC-Marist publicada la semana pasada encontró que los latinos en el estado están divididos en partes iguales entre Biden y Trump.

La demócrata Hillary Clinton lideró a Trump por un margen de 59% a 36% entre los latinos en la misma encuesta en 2016, y Trump ganó Florida por casi 1 punto porcentual.

Los votantes hispanos en Florida tienden a ser un poco más republicanos que en el resto del país debido a la población cubano-estadounidense del estado.

La decisión de Biden de celebrar el Mes de la Herencia Hispana en Kissimmee refleja un enfoque en la comunidad puertorriqueña en rápido crecimiento del estado, muchos de los cuales se mudaron a Florida después de que el huracán María devastó la isla en 2017.

El candidato presidencial demócrata, Joe Biden, llamó este lunes al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, “pirómano climático” por sus políticas medioambientales, en medio de la ola de incendios que arrasa el oeste del país.

“Los incendios están quemando los suburbios en el oeste, las inundaciones acaban con los barrios suburbanos del medio oeste, los huracanes hacen peligrar la vida suburbana a lo largo de nuestra cosa. Si tenemos cuatro años más de negación (de la crisis) climática de Trump ¿Cuántos barrios de las afueras acabarán quemados?”, reclamó Biden en un discurso en Wilmington.

Biden preguntó cuántos suburbios tendrían que inundarse o desaparecer a causa de las grandes tormentas para dar a un “pirómano climático” cuatro años más en la Casa Blanca.

Biden aseguró que Estados Unidos necesita un presidente que respete la ciencia y que comprenda que la crisis climática ya está aquí. Advirtió que si no hay acciones inmediatas, el futuro será “catastrófico”.

En ese sentido recordó que Trump piensa que la crisis climática es “una falsedad”.

Por el contrario, afirmó que si es elegido como presidente en las elecciones del próximo 3 de noviembre intentará solucionar el problema del calentamiento global y esbozó una serie de medidas que pondrá en funcionamiento para crear “una nación más fuerte, más resistente al clima”.

Biden adelantó que, de ser elegido presidente, hará que el país regrese de nuevo al Acuerdo del Clima de París, del que Trump se retiró. “Haré que estemos de nuevo liderando el mundo en cambio climático”, prometió el aspirante demócrata.

Desde que llegó al poder en 2017, Trump ha dado marcha atrás a numerosas medidas contra la crisis climática, al ordenar la retirada de EUA del Acuerdo de París sobre el clima, desregular las emisiones de las centrales térmicas de carbón y relajar las exigencias de eficiencia energética de los vehículos.

Trump visita este lunes California para comprobar de primera mano la situación por los incendios, que desde agosto han ocasionado la muerte de una treintena de personas, que se han extendido en Oregón y Washington, además de decenas de miles de evacuados y varios desaparecidos.

Ahí, el mandatario sugirió que el calentamiento global se revertirá, afirmando que el clima “comenzará a enfriarse”.

Mientras conversaba con un funcionario local en una reunión informativa en California sobre los incendios forestales que azotan el oeste del país, Trump desestimó las preocupaciones sobre el cambio climático y dijo: “Comenzará a enfriarse. Solo observa”.

El funcionario en cuestión, Wade Crowfoot, director de la Agencia de Recursos Naturales de California, respondió: “Desearía que la ciencia estuviera de acuerdo con usted”.

El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) lamentó la muerte de una mujer en un altercado entre la Guardia Nacional y pobladores de Chihuahua, aunque aseguró que se actuó los elementos de la corporación actuaron “muy bien” en el operativo.

El incidente ocurrió este martes tras el intento por parte de un grupo de agricultores chihuahuenses de tomar la presa de La Boquilla, en protesta por el desvío de agua a Estados Unidos al que México está obligado por un tratado de 1944.

“Actuó muy bien la Guardia (Nacional), porque, primero, eran muchos más los manifestantes y ellos aunque tenían armas deciden no usar las armas y se salen todos”, explicó el presidente, recalcando que hubo una retirada por parte de los elementos.

Según la versión del presidente, que está por “esclarecerse”, horas más tarde de ese operativo en el que se estima que había unos 2,500 manifestantes, unos manifestantes pasaron con vehiculos por otra infraestructura protegida por la Guardia Nacional.

Allí, supuestamente amenazaron a los agentes con “que les iban a tirar granadas o bombas” extraídas a la Guardia Nacional durante la toma de la presa. Los agentes procedieron a su detención y constataron que “en efecto llevaban granadas”, por lo que decidieron llevarlos a Delicias para ponerlos a disposición de las autoridades ya en la noche del martes.

En la caravana hacia Delicias “empiezan a seguirlos cuatro camionetas, a los de la Guardia Nacional, de los manifestantes, y se dan unos disparos”.

“Esta es la versión: contesta uno, primero unos tiros al aire, y de las cuatro camionetas se dan cuenta que queda una detenida. Las otras tres se van. Se paran los de la Guardia, van y encuentran que estaba herida de muerte, una señora y el esposo”, detalló López Obrador.

El presidente pidió a la Fiscalía que lleve a cabo la investigación correspondiente, para conocer qué fue lo que sucedió, y castigar a los responsables, aunque también pidió saber quién convocó a la movilización, quién tomó la decisión de tomar la presa, ya que aseguró que hubo la participación de dirigentes políticos.

Fue en ese punto donde dijo que debido a las elecciones que se llevarán a cabo en la entidad, el PRI y el PAN están engañando a la gente difundiendo información entre la población de que se quedarán sin agua.

“Lo que ya sabemos es que estaban utilizando el asunto del agua con propósitos político-electorales, porque existen intereses creados en el control y manejo del agua. El día  de estos lamentables hechos participaron dos exgobernadores del PRI, un diputado federal del PAN, el senador Madero, del PAN, en eso anda; pero no es justo, es inaceptable, que se use un asunto como este del agua, con propósitos electorales”, dijo el mandatario.

AMLO señaló específicamente al senador Gustavo Madero del PAN, quien aseguró busca la gubernatura del estado. Además mencionó a los exgobernadores Fernando Baeza Terrazas y José Reyes Baeza de estar relacionado con las protestas.

López Obrador acusó que los exgobernadores forman parte de una especie de “huachicoleros del agua”.

El presidente recordó que fue justo en el Chihuahua cuando en 1986 nació el PRI-AN, una alianza de facto entre el tricolor y Acción Nacional, la cual dijo se repite ahora que se viven tiempos  electorales.

“Cómo el régimen iba a permitir que un estado de la frontera gobernara un partido opositor, entonces se metieron con todo, hicieron el fraude, impusieron a uno de los que antier estuvo en la manifestación, uno de esos ex gobernadores Fernando Baeza, es interesante todo esto, eso fue en el 86, viene el fraude del 88, y se impone Salinas y Salinas se arregla con los opositores, de ahí nace el PRIAN”, relató AMLO.

El presidente Donald Trump acusó este lunes a sus rivales en las elecciones de noviembre, el exvicepresidente Joe Biden y su compañera de fórmula, Kamala Harris, de socavar la confianza de la ciudadanía en la futura vacuna de la COVID-19 por motivos políticos.

Sin embargo, es exactamente lo mismo de lo que le acusa Biden, quien ha advertido recientemente que Trump está “jugando a la política” y presionando para tener una vacuna disponible antes de las elecciones del 3 de noviembre, lo que puede “minar la confianza pública” en la eficacia del medicamento.

Durante una rueda de prensa en La Casa Blanca, Trump insistió en que la vacuna estará disponible en un “tiempo récord”, y arremetió contra Harris por haber asegurado que no “confiaría” en las promesas del mandatario sobre la seguridad de una vacuna si no van acompañadas de garantías de científicos.

“Biden y su compañera de fórmula (Harris) tan progresista, que no es competente en mi opinión, deberían disculparse inmediatamente por la retórica irresponsable antivacunas que están adoptando ahora. Eso socava la ciencia (…) y es una retórica política, es muy peligrosa”, subrayó el mandatario.

Trump llegó incluso a insultar al candidato presidencial demócrata, al afirmar: “Biden es una persona estúpida, ustedes lo saben”.

El presidente reaccionaba así a unas declaraciones de Harris durante una entrevista emitida este sábado por la cadena CNN, en la que la aspirante demócrata a la Vicepresidencia aseguraba que no se basaría solo en “la palabra” de Trump para confiar en una vacuna contra el coronavirus si La Casa Blanca la anuncia pronto.

“No confiaría en Donald Trump. Tendría que ser una fuente de información creíble que hable sobre la eficacia y la fiabilidad de lo que sea que él esté hablando”, aseguró la senadora demócrata.

Harris explicó que teme que Trump “amordace, suprima o deje de lado” a los expertos en salud pública porque se enfrenta a unas elecciones en menos de 60 días, y está tratando de agarrarse de lo que sea para fingir que ha liderado en el tema, cuando no es así.

Biden, de visita en Pensilvania, respondió a la pregunta de los periodistas de si se aplicaría una vacuna de contra el COVID-19 en caso de que Trump la presentara una antes de las elecciones.

“Solo si (el proceso) fuera completamente transparente, solo si supiéramos todo (el proceso) que ha debido atravesar la vacuna” hasta su aprobación, respondió el exvicepresidente.

No obstante, Biden aseguró que, después de “ver lo que dicen los científicos” sobre esa vacuna, le daría la bienvenida incluso si su llegada le da un impulso a la campaña de Trump.

“Si pudiera ponerme mañana la vacuna, lo haría. Incluso si me costara las elecciones, lo haría. Necesitamos una vacuna y la necesitamos ya”, enfatizó el candidato demócrata.

Algunos expertos en salud pública han expresado preocupación por la posibilidad de que La Casa Blanca esté presionando para saltarse etapas en el proceso de aprobación de la vacuna y anunciarla antes de los comicios de noviembre, y potenciar las opciones de reelección de Trump.

Un total de 523 ciudadanos lanzaron hoy un exhorto a partidos políticos y organizaciones de la sociedad civil, a colaborar en la elección del 2021, para lograr mayoría opositora.

Entre los firmantes figuran legisladores actuales, exlegisladoras y exlegisladores de los partidos PAN, PRI, PRD y MC, de las últimas 16 Legislaturas federales y de todas las entidades del país; así como 14 exgobernadores; 3 excandidatas presidenciales; exsecretarias y exsecretarios de Estado; así como exembajadores.

En el exhorto, demandan que los partidos políticos y la ciudadanía se comprometan a desarrollar una agenda política que responda de mejor manera a los grandes desafíos que la pobreza, la corrupción y la violencia representan para nuestro país.

De igual forma, lanzan una invitación a que tanto partidos como candidatas y candidatos a diputados, garanticen equilibrios entre los poderes públicos y razonabilidad en el presupuesto, y prioricen el gasto en salud, educación, seguridad pública, cultura y fomento económico, al proponerse y ser mayoría en la Cámara de Diputados.

Otro de los exhortos es a que ciudadanas, ciudadanos y organizaciones de la sociedad civil desplieguen su actividad cívica con intensidad, e impulsen a los partidos políticos y al gobierno a colaborar entre sí y con ella, para lograr procesos de alta participación.

Así mismo, que los partidos políticos den una “incontrovertible señal” de disposición a colaborar entre ellos en las modalidades permitidas por la Ley, y expresen su voluntad de incluir candidatas y candidatos no militantes para puestos de elección, con perfiles idóneos que, “además de su modo honesto de vivir, aporten a la integración de la representación popular nacional”.

“Todos queremos un país, unidos en la diversidad, en el que cada uno aporte su potencialidad por el bien de México. La democracia se fortalece y es eficaz a partir de gobiernos incluyentes y abiertos al diálogo. Los gobiernos con mayorías legislativas, aún surgidos de gobiernos legítimos y legales, deben promover el equilibrio y la separación de poderes, para no caer en autoritarismos”, señalaron.

El desplegado señala que el diálogo constante, el debate respetuoso, la colaboración entre fuerzas políticas distintas, y los mismos balances y contrapesos en las acciones de gobierno, son prácticas que enriquecen la agenda pública, y permiten mejores programas de gobierno; en último término, generan un mayor bien social.

Añade que, aun cuando cada proceso electoral es de singular importancia, la elección 2021 destaca porque será una elección intermedia muy relevante en la historia de México, luego de diversas alternancias.

Enfatiza que nadie tiene la solución única para las complejidades que enfrenta el país, por lo que señala que no se trata de colaboración entre afines, sino entre contendientes razonables en la búsqueda de coincidencias para el bien colectivo.

“Los partidos políticos son el principal medio para la participación electoral, y tienen ante sí la posibilidad de servir a la sociedad, al tiempo que aceptan y corrigen sus fallas, y resuelven sus carencias. La sociedad civil organizada y activa es determinante para consolidar el sistema democrático de representación”, menciona el exhorto.

Entre los firmantes aparecen Santiago Creel; Federico Döring; Beatriz Pagés Ricardo Pascoe; Jorge Triana; Josefina Vázquez Mota; Margarita Zavala; Ruth Zavaleta; Guadalupe Acosta Naranjo, Manuel Gómez Morín; Víctor Hugo Sondón, Juan Carlos Romero Hicks; Xóchitl Gálvez; Abril Alcalá Padilla; Verónica Juárez Piña; Agustín Barrios Gómez; Jose Luis Luege; entre otros.

El proceso electoral federal del 2020 y 2021 arrancó este lunes 7 de septiembre, siendo descrito por la autoridad electoral, el Instituto Nacional Electoral (INE), como el “más grande y complejo” de la historia.

95 millones de mexicanos están llamados a votar, 5 millones de personas más que en 2018. La votación se realizará en el marco de la pandemia de Covid-19.

“Este lunes 7 de septiembre comenzará formalmente el proceso electoral federal 2020-2021. El más grande y complejo de nuestra historia”, dijo el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova.

Córdova explico que hoy se vive “el arranque formal” de los comicios, por lo que “toda la estructura” del INE “se pone en marcha” para hacer posibles “todos los procedimientos y actividades necesarias” rumbo al 6 de junio de 2021.

“Para que el 6 de junio de 2021 millones de mexicanas y mexicanos acudamos a las urnas a ejercer nuestro derecho al sufragio efectivo, libre, secreto e informado”, apuntó.

El Consejo General del INE, explicó Córdova, toma protesta esta mañana a todos los vocales ejecutivos de las 32 juntas estatales, tanto para el proceso local como federal.

Se instalarán 164,550 casillas, casi 8,000 más que en la última elección federal. También se visitará a unos 12 millones de ciudadanos en sus domicilios con el fin de reclutar a cerca de 1.5 millones funcionarios de casilla.

“Estaremos votando para renovar más de 21,000 cargos de elección popular”, explicó Córdova Vianello.

Detalló que, entre estos, en los comicios de 2021 se elegirá a 500 diputados federales, 15 gubernaturas, 1,063 diputados de 30 congresos locales y 1,926 ayuntamientos en 30 estados.

Según analistas, estas elecciones pueden definir el rumbo de la segunda parte del mandato del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), cuyo partido, Morena, cuenta con mayoría en ambas Cámaras.

Las diversas etapas de los procesos electorales federal y locales transcurrirán en una circunstancia “especial”, la de la pandemia, que, “lamentablemente sigue siendo una realidad entre nosotros”, dijo Córdova.

“Aun así, la democracia deberá abrirse paso”, subrayó el titular del INE, quien destacó que estas elecciones deberán convocar a todos los actores políticos, sociales y de medios de comunicación para ejercer el derecho a voto con “responsabilidad y compromiso democrático”.

La más reciente polémica en torno a este proceso electoral fue la negativa de dar registro como partido político a la agrupación México Libre, del expresidente Felipe Calderón y su esposa, la exprimera dama Margarita Zavala.

En 2021 participarán los partidos Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI), del Trabajo (PT), Verde Ecologista de México (PVEM), Movimiento Ciudadano (MC) y Encuentro Solidario (PES).

Facebook informó este jueves que dejará de aceptar nuevos anuncios de índole política, la semana previa a las elecciones presidenciales en Estados Unidos, ante la preocupación de que la red social vuelva a usarse para publicar información falsa en el contexto de unos comicios.

Facebook indicó que estaba creando una identificación para aquellos anuncios de candidatos o campañas que reclamen la victoria antes de los resultados oficiales, ampliando los criterios para que este tipo de contenido sea eliminado.

El director ejecutivo de la compañía, Mark Zuckerberg, dijo en el mensaje en el que anunció estas nuevas medidas que era plenamente consciente de los desafíos a los que se enfrentaban los votantes estadounidenses a causa de la pandemia, un escenario que ha provocado el aumento del voto por correo.

“También me preocupa que, con el país tan dividido, los resultados de las elecciones tarden varios días o semanas en publicarse, lo que podría elevar el riesgo de disturbios en todo el país”, apuntó.

En cualquier caso, Facebook seguirá permitiendo a campañas y usuarios publicar anuncios políticos que ya estén en la plataforma, aunque prohibirá que se realicen cambios en dichos anuncios a nivel de contenido o diseño.

La red social ha sido recientemente objeto de críticas por permitir varios mensajes polémicos del presidente Donald Trump, incluyendo uno que contenía información engañosa sobre el voto por correo.

Los expertos también han alertado sobre las noticias falsas o ‘fake news’ y teorías de conspiración que circulan por Facebook en torno a la posibilidad de que los resultados oficiales no estén disponibles la noche de las elecciones.

En ese sentido, Zuckerberg dijo que en Facebook se estaban dando “cada vez más intentos de socavar la legitimidad de nuestras elecciones desde dentro de nuestras fronteras”, además de las campañas extranjeras, como la que, según determinaron Facebook y las agencias de inteligencia de EEUU, Rusia llevó a cabo en los comicios de 2016.

Para hacer frente a esas amenazas, la red social señalará cualquier mensaje que busque deslegitimar el resultado de las elecciones del próximo 3 de noviembre.

La compañía también eliminará los mensajes con información errónea sobre la pandemia de Covid-19 y el proceso de votación que, según Zuckerberg, podrían emplearse para infundir miedo a la población, provocando que no ejerzan su derecho al voto.

El presidente Donald Trump intentó matizar esta mañana las polémicas declaraciones en las que había pedido a los vecinos de Carolina del Norte que pusieran a prueba la seguridad del sistema electoral y votaran dos veces en las elecciones de noviembre, una por correo y otra en persona.

Esas declaraciones forman parte de la ofensiva de Trump contra el voto por correo, que muchos estados están ampliando debido a la pandemia y que el mandatario considera que puede favorecer el fraude, a pesar de que numerosos estudios demuestran que eso es extremadamente improbable.

Hoy Trump aseguró en Twitter que, en realidad, sus declaraciones de este miércoles buscaban instar a los votantes a verificar que su voto ha sido contado.

“PARA ASEGURARTE DE QUE TU VOTO CUENTA, FIRMA Y ENVÍA tu papeleta TAN PRONTO como sea posible. El día de las elecciones o en las votaciones por anticipado ve a tu centro electoral para ver si tu voto ha sido contado o no. Si ha sido contado no podrás votar y entonces el sistema de voto por correo habrá funcionado correctamente”, dijo Trump.

Explicó que si el voto no había sido contabilizado, “VOTA (que es el derecho de cualquier ciudadano)”.

Y es que en sus declaraciones de ayer, el mandatario no hizo ninguna mención de verificar los votos, y específicamente pidió a los residentes de Carolina del Norte que votaran dos veces, algo que constituiría un delito grave bajo las leyes de ese estado y supondría fraude electoral.

En concreto, en declaraciones a la prensa durante una visita a Wilmington, Carolina del Norte, Trump dijo: “Déjenles que lo manden (el voto por correo) y déjenles que voten, y si su sistema es tan bueno como dicen que es, entonces obviamente no podrán votar. Si no está tabulado, sí podrán votar”.

El mandatario también repitió esa idea directamente a algunos de sus simpatizantes que le esperaban cuando aterrizó en esa ciudad, al decirles: “Envíen (su voto por correo) temprano y después vayan y voten (en persona). No pueden dejarles que les quiten su voto, esta gente está jugando a política sucia”.

Hoy, el director de la junta electoral estatal de Carolina del Norte, Brinson Bell, explicó que hay numerosas medidas se seguridad para evitar que una persona vote dos veces y, por ejemplo, los trabajadores en las urnas tienen acceso a registros que muestran si ese ciudadano ya ha ejercido su derecho por correo.

“Votar dos veces en unas elecciones o solicitar a alguien que lo haga es una violación de la ley de Carolina del Norte”, advirtió Bell.

Carolina del Norte es uno de los estados donde las encuestas muestran una contienda más ajustada entre Trump y su rival en las elecciones de noviembre, el demócrata Joe Biden, que saca al presidente una ventaja de apenas 1.6 puntos porcentuales en ese territorio, dentro del margen de error, según la media de la web FiveThirtyEight.

Muchos expertos temen que el presidente Donald Trump presione para que se apruebe una vacuna contra el coronavirus en Estados Unidos antes de las elecciones presidenciales del 3 de noviembre.

Los científicos estiman poco probable que los ensayos clínicos den resultados provisionales en los próximos dos meses.

Así, la intención de presentar la vacuna días antes de la elección presidencial sería un acto meramente político y no enfocado en la salud.

Y es que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos han pedido a los funcionarios de salud pública de los estados que se preparen para distribuir una posible vacuna contra el coronavirus a los grupos de alto riesgo tan pronto como a finales de octubre, según documentos publicados por la agencia.

El momento ha adquirido importancia política ya que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, busca la reelección el 3 de noviembre, después de comprometer miles de millones de dólares para desarrollar vacunas contra el COVID-19, que ha matado a más de 185,000 personas en Estados Unidos.

Pfizer Inc. dijo el jueves que debería tener información hacia finales de octubre sobre si la vacuna COVID-19 que está desarrollando con su socio alemán BioNTech SE es segura y eficaz.

El fabricante de medicamentos dijo que buscará la aprobación de inmediato si los resultados de las pruebas son positivos y que ya ha fabricado cientos de miles de dosis.

El principal experto en enfermedades infecciosas de Estados Unidos, Anthony Fauci, dijo este jueves que es posible tener una vacuna lista para finales de octubre, pero que no era algo seguro.

“Todo esto son conjeturas”, dijo Fauci a CNN, cuando se le preguntó sobre los comentarios de Pfizer, añadiendo que la mayoría de los expertos proyectan que la vacuna estará lista para noviembre o diciembre. “Es concebible que pueda estar lista para octubre, pero no creo que eso sea probable”.

Los CDC “proporcionaron a los estados ciertos supuestos de planificación mientras trabajan en planes específicos para la distribución de vacunas, incluyendo la posibilidad de tener cantidades limitadas de vacunas en octubre y noviembre”, dijo a la agencia Reuters una portavoz de la agencia.

The New York Times había informado antes que los CDC se habían puesto en contacto con funcionarios de los 50 estados y de cinco grandes ciudades con información para la planificación de la inmunización.

Los documentos publicados por The New York Times mostraron que los CDC se están preparando para que una o dos vacunas para el COVID-19 estén disponibles en cantidades limitadas a finales de octubre.

La Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ordenó al Consejo General del Instituto Nacional Electoral (INE) modificar el acuerdo por el cual determinó la suspensión de las conferencias matutinas del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) en los estados de Coahuila e Hidalgo.

El INE había ordenado que los concesionarios de radio y televisión no transmitiran las conferencias matutinas del presidente en dichas entidades, debido a que habrá elecciones el próximo 18 de octubre.

Las magistradas y los magistrados decretaron que el INE deberá sesionar dentro del plazo máximo de 48 horas después de que sean notificados para realizar los trámites necesarios y que de nueva cuenta se publique en el Diario Oficial de la Federación el acuerdo impugnado, con la modificación ordenada.

Señalaron que de conformidad con el acuerdo aprobado en enero de 2017, y por el que el INE estableció el plazo para la presentación de solicitudes para analizar si se debía suspender la transmisión de determinada propaganda gubernamental durante las campañas electorales y la jornada electoral, diversos entes gubernamentales le solicitaron se permitiera la difusión de propaganda institucional, durante el periodo de campaña en los estados de Coahuila e Hidalgo.

La decisión del Tribunal surge luego de que el 28 de agosto, Morena interpusiera un recurso de apelación ante la decisión del INE.

La Sala Superior consideró que atendiendo a que, de conformidad con la propia reglamentación del Instituto, la materia del acuerdo debió constreñirse a la calificación de las solicitudes que recibió por cuanto a la difusión de programas específicos de gobierno.

Hoy, durante su conferencia matutina, el presidente comentó sobre la prohibición del INE.

“No estoy de acuerdo porque esto no es propaganda, es información y también ya presentamos nuestra queja sobre este tema. Si estuviese yo llamando a votar por un partido o por un candidato… Pero aquí se tocan temas generales, se informa”, respondió López Obrador.

Aseguró que se debe analizar bien el sentido de las mañaneras, pues están lejos de ser una intromisión al proceso electoral.

Las convenciones de los partidos Demócrata y Republicano suelen definir un antes y un después en las preferencias electorales en Estados Unidos.

El candidato demócrata, Joe Biden, sigue aventajando al presidente Donald Trump aunque el margen de ventaja se acortó a siete puntos porcentuales,según una encuesta que publica este miércoles el diario USA Today.

La encuesta, realizada por la Universidad Suffolk para el diario, daba a Biden una ventaja de 12 puntos en junio, y ahora le asigna el respaldo del 50% de los votantes, comparado con el 43% del presidente.

La encuesta realizada entre 1,000 votantes registrados entre el 28 y el 31 de agosto, encontró que el 28% de los partidarios del exvicepresidente Biden, y el 19 % de los simpatizantes de Trump no están preparados para aceptar la victoria del rival.

Entre los que dicen que apoyarán a Biden, el 49% indicó que votará por este candidato, aunque el 33% señaló que su decisión responde más al deseo de votar contra Trump porque ven “peligros graves” en un hipotético segundo mandato del republicano.

Un promedio de otras encuestas que realiza la plataforma Fivethirtyeigh.com encuentra que el índice de rechazo a la presidencia de Trump ha disminuido del 56.4% a fin de julio a un 52.5% después de la Convención Nacional del Partido Republicano.

Asimismo, el índice de aprobación ha subido en el mismo período del 40.5% al 43.5%, esto es apenas el índice más alto de popularidad que Trump ha logrado en tres años y medio de gobierno.

Para RealClearPolitics, otra plataforma que elabora su promedio de varias encuestas, Biden cuenta ahora con la simpatía del 48.9% de los posibles votantes y Trump tiene el apoyo del 42.5%.

Para esta organización, y cuando faltan 61 días para la elección, el índice de aprobación de la gestión de Trump se encuentra en el 45% y el de desaprobación en el 53%.

Recordemos que en Estados Unidos los ciudadanos no eligen directamente al presidente, sino a los 538 delegados del Colegio Electoral distribuidos de acuerdo con la población de cada Estado, y se necesitan 270 “electores” para ganar la elección.

La plataforma 270towin.com, sobre la base de las encuestas de opinión en los estados, indica que si las elecciones fuesen ahora, el candidato demócrata contaría con 278 electores, y Trump con 169, mientras hay 91 delegados cuya adjudicación no está decidida.

Arturo Sarukhán

EL UNIVERSAL

 

 

Han concluido las dos convenciones nacionales partidistas en Estados Unidos y estamos ya en la antesala del arranque de la campaña general y las diez semanas críticas que definirán el futuro de la democracia estadounidense, pero también el de la vitalidad democrática en otras naciones.

Políticamente, tanto Demócratas como Republicanos parecen haber obtenido lo que necesitaban de sus respectivas convenciones. Hace diez días los Demócratas y Joe Biden hilaron una narrativa eficaz y demoledora de lo que ocurrirá si Donald Trump se reelige, convirtiendo su convención en un referéndum sobre el presidente. Los favorables del ex vicepresidente incluso subieron cinco puntos porcentuales como resultado, mientras que los de Trump no se han movido. Por ello, el objetivo del GOP la semana pasada era apremiante y simple: que el mayor número de votantes posibles olvidasen que más de 180,000 estadounidenses han fallecido a causa de una pandemia bajo la gestión -o ausencia de ella- de este presidente (cada tres días están muriendo el mismo número de estadunidenses que perecieron en los atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001) y que el país encara una dislocación económica y social inédita. En un intento por recuperar votantes suburbanos y mantener incólume su voto duro con votantes blancos en zonas rurales, querían proyectar imágenes de ciudades gobernadas por Demócratas como convulsas y caóticas; las manifestaciones y disturbios en respuesta al tiroteo a otro afroamericano en Kenosha, Wisconsin (estado en el cual Biden tiene la ventaja más estrecha sobre Trump de los 5 o 6 estados bisagra clave en juego para la elección de este año) les cayeron como anillo al dedo para enmarcar esa narrativa. Trump, el pirómano en jefe, necesitaba subrayar que los Demócratas son un peligro para este segmento del electorado y para el bienestar y la seguridad del país: ahondar el factor miedo de la fórmula Biden-Harris, principalmente usando los disturbios y protestas por la brutalidad policiaca como botones rojos; las “ciudades santuario” como focos de criminalidad; argumentar que Biden dejaría entrar a los “yihadistas”, derribaría el muro y soltaría a los criminales, eliminando los presupuestos para departamentos de policía en el país; ciudades vs suburbios y zonas rurales como la falla tectónica a explotar.

El GOP esencialmente celebró y destacó una país pre-COVID, y por ende la plétora de mentiras o medias verdades para proyectar esa imagen hicieron de sus discursos un festín para los verificadores de datos de los medios. La convención también buscó, con su deleznable alcahueteo de una ceremonia de naturalización de inmigrantes y un desfile de más diversidad étnica a lo largo de cuatro días de discursos que la que contiene su gabinete entero, que Trump sea más potable para votantes indecisos en los suburbios que podrían sentirse repugnados por su retórica pero a quienes les gustan algunas de sus políticas. Es decir, que se tapen la nariz y se sientan con menos remordimiento pensando que al final del día están votando por alguien que quizá no sea tan racista o misógino como sugiere el tufo que despide el mandatario.

Y sí, es realmente alarmante que el presidente haya utilizado de manera facciosa y bananera monumentos y sitios emblemáticos del país (Fort McHenry, el Monumento a Washington y la Casa Blanca) con fines político-electorales y partidistas en un quiebre con la tradición, las normas políticas y el marco legal y con integrantes del gabinete ya sea fungiendo como oradores o presentes en el discurso de aceptación del presidente, en flagrante violación del Acta Hatch que prohíbe a funcionarios participar en actos proselitistas. El discurso de aceptación de Trump en los jardines de la Casa Blanca fue la demolición final de los límites que habían existido en EE.UU entre el Ejecutivo y una campaña política. Y, ¿plataforma? ¿Cuál plataforma? El partido de Lincoln por primera vez no tiene una propuesta de política pública para la campaña: la plataforma es Trump y lo que diga Trump. El GOP lamentablemente enfrenta hoy el mismo dilema que el Dr. Frankenstein: qué hacer con su monstruo.

Con el paso del verano, se ha ido volviendo más viable que Biden pueda vencer al presidente Trump en las urnas. Con un mandatario que parece estar crecientemente fuera de sintonía con el estado de ánimo nacional -desde su manejo de la pandemia hasta sus respuestas y posturas ante el racismo y la brutalidad policiaca contra ciudadanos afroamericanos- sin mencionar una amplia gama de otros temas incluyendo la erosión de la investidura presidencial y su petulancia e injurias que solo van en aumento, Biden arrancará la campaña general con moméntum y tracción electoral. Y si bien las encuestas nacionales a fines de agosto son un baremo aún incompleto, éstas no favorecen a Trump, e incluso en los cinco o seis estados decisivos, los llamados estados bisagra (en esta elección presidencial particular, Wisconsin, Pennsylvania, Michigan, Florida, Arizona y potencialmente Carolina del Norte) para el Colegio Electoral, Trump ha perdido terreno -tanto en términos de números en las encuestas como del perfil socio-demográfico de la coalición de votantes que requiere obligadamente para ganar- que no le será fácil recuperar.

Pero lo que parece probable en este momento no elimina la posibilidad de que Trump pudiese dar de nuevo, el día de la elección, el campanazo y quedarse con la presidencia por un segundo periodo, ni que el pasado -lo que ocurrió en los comicios de 2016- pueda ser prólogo. Tampoco ha sido tan infrecuente, históricamente, que las encuestas en Estados Unidos cambien radicalmente entre fines de agosto y el día de las elecciones. Y éstas se cerrarán más de lo que ya están. En ese contexto, es probable que el presidente tenga una ventaja con una elección competitiva debido a que el Colegio Electoral favorece estructuralmente a los Republicanos y que el rompecabezas de votos electorales tiende a beneficiarlos (particularmente por el número de estados agrícolas). Ello significa que Biden bien podría necesitar colocarse por lo menos cuatro puntos por delante en los resultados nacionales para estar seguro de la victoria en el Colegio Electoral.

En muchos sentidos, Trump y Biden están librando la campaña de 2020 como si fuera 1968, cuando las calles se convirtieron en campos de batalla, la nación se convulsionó social, política y culturalmente y Richard Nixon hizo un llamado a “la ley y el orden”, basado en el miedo de una “mayoría silenciosa”. Ambas campañas presidenciales están usando lo que ocurre hoy en las calles estadounidenses para validar su teoría de lo que la mayoría de los estadounidenses cree y quiere. Pero ninguna puede controlar los eventos que han alimentado una potencial primavera estadounidense, repleta de disturbios y descontento social en Estados Unidos, por lo que están tratando de controlar la narrativa. Así arrancará la campaña general con todo a partir del día del Trabajo (que este año cae el lunes venidero), y será en ese momento en el que habrá que seguir, ahora sí de cerca y de manera más granular, las encuestas (particularmente las que son a nivel estatal) para ver cómo se decanta ese 13 por ciento determinante del electorado que a estas alturas parece no haber tomado aún una decisión sobre cómo votará el 3 de noviembre.

Mark Zuckerberg y su esposa, Priscilla Chen, anunciaron este martes una donación de 300 millones de dólares a organizaciones dedicadas a garantizar elecciones seguras en Estados Unidos en plena pandemia del Covid-19.

En un mensaje en la red social, Zuckerberg dijo estar “preocupado por las dificultades en que se encuentra nuestra infraestructura electoral este año a causa de la pandemia”, debido a la previsión de un gran incremento del voto por correo y el reto de mantener las distancias de seguridad en caso de votar en persona.

Del total de 300 millones, 250 irán al Centro para la Tecnología y la Vida Cívica, que se dedicarán a la contratación y entrenamiento de trabajadores para la jornada electoral del 3 de noviembre, así como a comprar material para los centros de votación.

Los 50 millones restantes se dirigirán al Centro para la Innovación e Investigación Electoral, que a su vez los repartirá
entre las distintas Secretarías de Estado del país (responsables de la organización electoral) para que mejoren las medidas de seguridad y provean de información a los electores.

En los comicios del 3 de noviembre se enfrentarán el actual presidente y candidato republicano a la reelección, Donald Trump, y su rival demócrata, Joe Biden.

Además, se elegirá también a la totalidad de miembros de la Cámara de Representantes, a un tercio del Senado y a diversos cargos estatales y locales.

La donación de Zuckerberg y Chen -y su anuncio público- es parte de la respuesta del multimillonario a las críticas que Facebook ha recibido durante los últimos meses por parte de quienes le acusan de no estar haciendo lo suficiente para perseguir la información falsa en la plataforma, y para garantizar la celebración de unas elecciones seguras.

En concreto, políticos y activistas cercanos al Partido Demócrata acusan a la firma de ser muy permisiva con los contenidos que comparte el presidente Donald Trump, incluso cuando estos son contrarios a las normas de uso de la propia plataforma.

Donald Trump mantiene sus ataques contra los demócratas acerca de incitar a la violencia en Estados Unidos, tras nuevos enfrentamientos durante manifestaciones antirracistas y la muerte de un hombre en Portland.

La seguridad se ha convertido en un tema central de la campaña para las elecciones presidencial del próximo 3 de noviembre.

Trump se ha presentado como una garante de la “ley y orden” mientras que Biden lo acusa de provocar tensiones.

El presidente estadounidense “está alentando la violencia de forma irresponsable”, dijo el exvicepresidente de Barack Obama en un comunicado el domingo. “Quizá él crea que tuitear sobre la ley y el orden lo hace fuerte, pero su incapacidad para llamar a sus seguidores para que dejen de buscar conflictos muestra justo cuán débil es”.

El equipo de campaña del aspirante demócrata confirmó que Biden pronunciará un discurso este lunes para responder a lo que él presenta como una pregunta a los electores: “¿Está usted seguro en los Estados Unidos de Donald Trump?”.

La muerte a tiros de un hombre y los choques entre seguidores y opositores al presidente en Portland, Oregon, ocurren tras una semana de protestas en todo el país, que incluyeron una histórica paralización en el deporte ante la indignación que generó un nuevo caso de violencia policial contra un hombre negro.

Jacob Blake, un afroestadounidense de 29 años, recibió varios tiros a por la espalda hace una semana en Kenosha, Wisconsin, por parte de un policía que intentaba arrestarlo. Aunque sobrevivió, probablemente quede paralítico.

Trump reaccionó enviando docenas de tuits y retuits el domingo que criticaban la actuación del alcalde demócrata de Portland, Ted Wheeler, y su negativa de llamar a la Guardia Nacional y, a nivel más general, denunciando la blandeza, según él, de las ciudades gobernadas por demócratas frente a la violencia.

La Guardia Nacional “podría resolver estos problemas en menos de una hora”, dijo.

“Wheeler es incompetente, así como el dormilón Joe Biden”, dijo Trump. “Esto no es lo que quiere nuestro gran país. Quieren seguridad y no que la policía sea desfinanciada”.

En Portland, siguen rechazando todo tipo de ayuda del gobierno para detener los actos de violencia que tienen lugar desde hace casi 90 días, señaló el secretario interino de Segureidad Interior, Chad Wolf, a la cadena ABC.

Trump viajará el martes a Kenosha, donde un joven de 17 años es acusado de matar a tiros a dos hombres durante las protestas y disturbios que siguieron a los disparos contra Jacob Blake.

El sábado, una persona murió baleada en Portland en circunstancias confusas durante enfrentamientos entre manifestantes antirracistas y seguidores de Trump.

Portland ha sido durante meses epicentro de las protestas del movimiento Black Lives Matter contra la violencia policial desde la muerte en mayo en Minnesota de George Floyd, un hombre negro asfixiado por un policía blanco.

Varios centenares de vehículos conducidos por simpatizantes del presidente, con banderas estadounidenses y pro-Trump, desfilaron el sábado en Portland, donde se encontraban manifestantes de Black Lives Matter, dando lugar a intercambio de insultos y altercados.

El alcalde demócrata de Portland acusó a Trump el domingo de arremeter contra los gobiernos demócratas locales, luego de haber acumulado durante cuatro años críticas por sus ataques contra periodistas e inmigrantes.

“¿Se pregunta, seriamente, señor presidente, por qué es la primera vez en décadas que Estados Unidos vive este nivel de violencia?”, cuestionó Wheeler durante una rueda de prensa. “Es usted que ha creado el odio y la división”.

En una carta abierta a Trump, Wheeler había denunciado la “política de división y demagogia” del presidente.