La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) pidió este miércoles a los mexicanos que viven en Texas acercarse a los consulados y “conocer sus derechos” ante los fallos “contradictorios” sobre la ley SB4 de ese estado, que permitiría a las autoridades estatales detener y expulsar a migrantes indocumentados.

“Aconsejamos a personas mexicanas en Texas acercarse a los 11 consulados mexicanos y conocer sus derechos ante actos antiinmigrantes, discriminatorios o de corte racial. ¡No están sol@s!”, escribió la canciller Alicia Bárcena, en su cuenta de X.

La ley SB4, una de las medidas antiinmigrantes más drásticas en la historia de Estados Unidos, convertiría en delito menor el que un extranjero ingrese o intente ingresar a Texas desde otro país de forma irregular, además de facultar a las fuerzas estatales de realizar arrestos migratorios.

Su aplicación desató caos este martes, cuando la Suprema Corte de Estados Unidos primero permitió aplicar la ley antes de escuchar argumentos de fondo, aunque más tarde, cerca de la media noche, el tribunal de apelaciones del Quinto Circuito suspendió su entrada en vigor.

La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) avisó tras el fallo de la Suprema Corte de Estados Unidos que México no aceptaría a migrantes deportados por el Gobierno de Texas.

En el mismo sentido se posicionó esta mañana el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO). Al anunciar que la cancillería podría responder por la vía diplomática, calificó la SB4 como “draconiana”, “deshumanizada” e “injusta”.

“Además es violatorio del derecho internacional, no puede uno tener una legislación que corresponde al fuero federal”, dijo AMLO al subrayar que los estados en México y Estados Unidos no pueden tomar medidas en política exterior que corresponden al fuero federal.

López Obrador señaló que si Texas comienza a deportar a migrantes al otro lado de la frontera, el gobierno mexicano no se va a quedar “de brazos cruzados” y habrá una “respuesta”; matizó que el asunto no está todavía definido en las instancias judiciales de la nación vecina.

Las tensiones entre México y el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, han crecido desde el año pasado ante las crecientes medidas antiinmigrantes del estado fronterizo, como las boyas y alambre de púas que colocó en el Río Bravo para disuadir a los migrantes de cruzar.

Apenas el 20 de febrero, el presidente López Obrador tachó de “politiquería” el campamento militar que Abbott pretende construir junto al río. El mandatario ha adjudicado los actos de Texas a que este año coinciden las elecciones presidenciales de México y Estados Unidos.

Ana Paula Ordorica es una periodista establecida en la Ciudad de México. Se tituló como licenciada en relaciones internacionales en el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) y tiene estudios de maestría en historia, realizados en la Universidad Iberoamericana.



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